viernes, 7 de marzo de 2014

Casados sin reflexión

Un hombre conoció una linda mujer y decidió casarse con ella inmediatamente.

Ella le dice:


- Pero no sabemos nada uno del otro...


El respondió:


- No hay problema, nos conoceremos con el tiempo. 


Ella aceptó.


Se casaron y fueron a pasar la luna de miel en un lujoso apartamento. 


Cierta mañana, estaban ambos recostados junto a la piscina, cuando él se levantó, subió al trampolín de 10 metros realizó una perfecta demostración de todos los saltos que existen y regresó junto a la esposa.

Ella le dice: 


- ¡Eso fue increíble!

- Fui campeón olímpico de saltos ornamentales. Te dije que nos conoceríamos con el tiempo- respondió él.


En eso, ella se levanta, entra en la piscina y comienza a nadar, ida y vuelta con impresionante velocidad. Después de 30 vueltas, sale y se va a recostar junto al marido, sin demostrar ningún cansancio.


El dice:
- Estoy sorprendido!, ¿fuiste nadadora olímpica?


- No, -explicó la dama- fui prostituta en Venecia y atendía a domicilio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario