Los diez mandamientos del webcomiquero

01.  Lee libros, haz cosas, vive la vida: No dejes que todas tus ideas provengan de los dibujos animados de la tele.

02.  Piénsate 12 veces los chistes antes de dibujarlos (puedes estar depurando tu webcómic sin tocar un lápiz, mientras esperas el autobús, te cortas las uñas o participas en conversaciones aburridas).

03.  Haz la letra grande: Gran parte de tus potenciales lectores son miopes y merecen una oportunidad.

04.  Escanea en blanco y negro (a 300 ppp) y pásalo luego a escala de grises (escanear directamente a escala de grises es tentador pero queda muy guarro).

05.  No es necesario ser un virtuoso del PhotoShop, pero vale la pena aprender a Cortar y Pegar, Copiar y Pegar, y por supuesto, Deshacer (Ctrl+V, Ctrl+P, Ctrl+C, Ctrl+P, Ctrl+Z).

06.  Guarda al menos dos copias de cada cómic: una a buena resolución por si algún día hay que imprimirlo y otra que cumpla el doble objetivo de ser lo suficientemente grande para leerse sin lupa y lo suficientemente pequeña para caber en el ancho de la pantalla sin usar vaselina.

07.  El Blogger es una caca y las webs artesanales tienen su encanto, pero los profetas recomiendan WordPress (www.wordpress.org) + Comicpress (mindfaucet.com/comicpress/).

08.  Léete algún tutorial de SEO y aprende a dar a conocer tus cómics sin tener que espamear por mail ni dar la paliza por los foros.

09.  Apúntate a Webcomics.es (webcomics.es) y a Cómics en Blog (comicsenblog.blogspot.com).

10.  Recuerda que los consejos (estos y otros) te los puedes pasar por el forro: La principal ventaja de los webcómics frente a los cómics impresos es que nadie paga por leerte, ergo no tienes jefes, ergo puedes hacer lo que te salga de tus zonas más íntimas. Faltaría más.